Amplia visión y desarrollo de los conocimientos multi o interdisciplinarios de su profesión obtenida con el grado universitario a través de su especialización en comportamiento humano desviado, con potencial para ser el proponente de nuevas políticas criminales, criminológicas, victimológicas y del Sistema Penitenciario que redunden en una mayor Seguridad Pública y por ende en la modificación del fenómeno social de la criminalidad.

Las destrezas logradas implican la posibilidad de diagnosticar, tratar, prevenir e intervenir en cualquier situación donde se vea implicado un comportamiento antisocial o sus precedentes y consecuencias, realizando un análisis científico profundo del mismo. El Psicólogo Criminal desarrolla habilidades para reconocer factores determinantes de la criminalidad, la victimización y prevención delictiva, mediante el estudio de actitudes, comportamientos, lenguaje corporal, expresión lingüística, probablemente condicionados por un historial médico, psicológico, toxicológico, antropológico, sociológico, es decir, constituyendo un informe integral sobre la(s) persona(s) objeto de estudio.

Sus actitudes se apegan a la obligación criminológica, criminalística, médica y jurídica con un sentido de actualización constante y en apego a los valores de responsabilidad, honestidad y sentido de justicia, verificados en el Ideario IZEU.